Asturias, España

      La Boda de Fabio y Jana estuvo llena de emociones que comenzaron el día del anuncio del confinamiento que los obligaba a postergar los sueños. De pronto, tuvieron que pausar la ilusión que significaba la celebración de su tan esperada boda que ocurriría apenas unos días más tarde. A pesar de la incertidumbre y el desasosiego, mantuvieron intacta la esperanza de que el día vendría en el momento preciso. Y el día llegó unos meses más tarde premiándolos con una Asturias llena de sol y alegría. Las  particularidades propias de las circunstancias no pudieron evitar el goce de la felicidad compartida.

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     Se dice que las novias siempre son hermosas, pero en Jana había mucho más que eso, ella irradiaba una luz cálida y brillante que titilaba al compás de sus emociones confusas que iban y venían entre lágrimas de nostalgia por los que no pudieron estar presentes, de alegría por lo que significaba la formalización de una relación bien establecida unos años atrás y miles de besos de amor para Fabio además  risas, sonrisas,  abrazos para sus invitados, familia y amigos que los arroparon en todo momento celebrando lo que sería su sueño hecho realidad.

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     Para mi como fotógrafa, fue un privilegio ser testigo del amor que flotó en el aire en todo momento como si se tratara del más delicioso de los perfumes. Con mi cámara quise atrapar su esencia para retener el aroma por el resto de sus días a través de imágenes que documentan cada minuto de lo que  significó un día tan especial en sus vidas

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     Felicidades Fabio y Jana. Gracias por recibirme como una más de sus invitados. Celebro con ustedes todo su amor.